lunes, 8 de diciembre de 2008

Miedo

Publicado por Facundo Falduto en Artepolítica


Tengo miedo, nene, como diría el Bambino. No, no es el miedo de salir a la calle, que me maten, me organicen una marcha por la inseguridad y la Cadena Televisiva del Pavor (TN, Crónica, C5N, siguen las firmas) repitan la noticia ad nauseam. No, no es eso. Me da miedo el pos-kirchnerismo, mamá.

Porque sí, hay que vivir el momento. Pero no sabemos qué va pasar en el 2009. Ni hablar del 2011. Me da mucho miedo pensar en qué va a pasar con el país cuando el-proceso-que-comenzó-en-2003 abandone el poder. Sea cuando sea. Porque va a pasar, es inevitable, y lo más probable es que la salida sea por derecha.


Pero no es eso lo que me quita el sueño a la 1.20 de la mañana tras la Reunión Dominical y Choripanera de Bloggers Peronistas. Lo que no me deja dormir es pensar en qué será de nosotros cuando ese proceso haya terminado. Me refiero a "nosotros" en términos de esos incorregibles, rentados, arriados por el chori y la coca, incondicionales, soberbios, agresivos, fundamentalistas cyber ñoquis K. O sea, exagerando, todos aquellos que de una forma u otra hemos expresado nuestro apoyo al gobierno y/o a algunas de sus políticas, tanto en el terreno virtual como en el llano.

Estoy convencido de lo que pienso, y sé que la mayoría, sino todos, de ustedes también. Pero en lo más profundo tengo miedo de que estemos cometiendo un error histórico. De que hayamos meado fuera del tarro. De que mañana, en 2009, 2011, o cuando sea, despertemos y nos demos cuenta de que fue todo una ilusión. Que todo lo que dijimos y creímos estaba mal. Porque, pienso, en todos los procesos histórico-políticos ha habido pensadores, intelectuales, y hasta gente como yo que no es ninguna de las anteriores, que ha apoyado ideológica y sinceramente, creyendo en lo que decía.

Mi miedo es que, a los ojos de la historia, el kirchnerismo quede como un neomenemismo, y nosotros como sus ideólogos. Paradojicamente, cuando pienso eso es cuando mayor alivio me da, porque recuerdo que los el menemismo no tuvo ideólogos mayores que Bernardo Neustadt, Moisés Ikonikoff o Jorge Asís(*). En cambio, de sólo mirar las firmas al pie de la Carta Abierta, me reconforta pensar que, como proponía un Capusotto Punk en Cha Cha Cha, "seremos boludos, pero somos una bocha".

Mi otro miedo es a la Lizfassilavallización (?), a volvernos parias, a ser rechazados por la sociedad. Por suerte, choripán en mano, Diego F. se encargó de sacarme de mi preocupación, equivalente a la de un ciego a que se le meta algo en un ojo. "Ya somos parias", me dijo. Y es un poco cierto. Somos incomprendidos y mirados como extraterrestres, más en los ámbitos clasemedieros porteños en los que nos movemos la mayoría de nosotros. Yo, por ejemplo, tengo pavor de decirle a mis suegros que soy peronista, a ver si me pasa lo que le pasó a Mendieta.

Son temores en offside, es cierto, acaso un poco infundado, pero me asaltan a veces. De todas formas, como toda perspectiva hacia el poskirchnerismo, es lo que hay, por ahora. Hasta que no cambien los escenarios, tendremos que seguir en esta. Si estás en el baile, tenés que bailar. O como siempre dice una amiga: ya que nos vamos al infierno, que sea por la puerta grande.

(*) Para hacer justicia, puede que el menemismo haya tenido mejores y más presentables idéologos. Pero en 1989 tenía tres añitos, así que puede que mi visión de la época esté un tanto incompleta, digo. Si quieren corregirme, ahí están los comentarios.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Che Faco, acá te dejo el link al blog de las remeras:

http://laremeraquequieras.blogspot.com

Suerte,

Julián

María dijo...

yo también tengo miedo.